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jueves, 10 de noviembre de 2011

ASPIRAR EL CAMPO Y ENTREGAR TU HISTORIA

Eres es el flujo de Vida Única debajo o detrás de cualquier historia sobre "ti" que te estés contando a ti mismo en este momento. Si ahora perdieras la memoria por una conmoción te sentirías un rato desorientado, perdido, sin identidad, sin historia. Para la sociedad, para tu ego, eso es muy malo. Para tí es maravilloso. Durante ese rato que estuvieras sin memoria serías solo un campo de energía consciente integrado a todo un campo de energía consciente. Sin nombre, sin profesión, ni edad, ni enfermedades. Parece terrible vivir sin historia, pero en realidad es lo único que puede salvarte del sufrimiento. Ya que todo sufrimiento es una historia que nos cuenta la mente.
Un ejercicio que puedes hacer para liberarte de la cárcel de la identidad (dónde reside el sufrimiento) es lo siguiente:
Varias veces al día, estés dónde estés y con quien estés, respira unas tres veces. Siente como todo ese campo de energía, de consciencia incondicionada entra en ti por tus fosas nasales. En respuesta a eso que te da el campo, tú entrégale un poco de ti, de tu historia personal. Entrega tu identidad sexual, tu forma física, tu nombre, tu carencia del momento, tus angustias más recientes. Lo que estás haciendo es entregar un poco de ego y recibir más de ti. Para ese campo de energía consciente que eres en realidad no existe un yo y un no-yo separado. Para ese campo lo que llamas tú, está totalmente integrado. Puedes pasar por el día aspirando el campo y entregando tu historia mientras haces lo de todos los días. Puedes ir a comprar el pan siendo un campo, ir a buscar trabajo siendo un campo, hablar con la gente con la que te encuentres siendo solo un campo de consciencia totalmente en paz. Momento a momento puedes aspirar todo ese flujo, todo ese campo de energía que es la existencia y al soltar el aire "sentir" que se va un poco de tu identidad problemática, ese yo con todos los argumentos posibles con los que justifica su ausencia de paz. Entonces los problemas pierden un poco de identidad también...se van con cada exhalación. Con cada exhalación entregas un poco de conflicto y con cada inhalación aspiras un poco de paz. Si logras hacer esto muchas veces al día, el mundo de la experiencia se volverá más bondadoso. Entonces esa idea de "esto soy yo con todos sus problemas" se desvanece un poco en ese campo que eres, tu geografía sin historia. Recuerda que el sufrimiento necesita de "ti" y sus interminables conflictos. Cuando menos haya de ti, más habrá de Ti. Aspira Ti, y devuelve ti.  Esa es la gran danza del universo. El día que desaparezca tu historia por completo, el momento presente será toda tu biografía. Solo el escenario del Ahora, sin más teatralidad y dramatismo  que resolver en paz... este momento.



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